domingo, 5 de noviembre de 2023

Análisis: Intro Pankaio

¡Hola de nuevo! Increíble la constancia que estoy llevando con esto chaval fua.

Bueno hoy traigo uno de los poemas del poemario que preparo, en concreto el primero que escribí y el que de momento tiene pinta que será la intro del proyecto. Por aquel entonces el poemario iba a ser nombrado 'El dios de la basura' como contraparte a mi poema 'el dios de la chatarra', estableciendo así esa primera dualidad entre lo orgánico y lo inorgánico, pero por motivos que ahora mismo desconozco la idea fue derivando hacia lo que es hoy. El dios de la basura sería una especie de construcción divina alrededor de mi visión de la realidad. Como dije en el anterior post, desde el principio, el proyecto era una exploración espiritual, pero quizás en este punto todavía era desde un cinismo amargo y míope. El caso es que la idea inicial era que todo dios es un reflejo de la comunidad que le hace existir, ya fuese de su realidad más cruda, de su deseo o de su temor. Así pues, este dios sería una divinidad con la atribución de la disgregación, el pudor y la conveniencia (con todas sus connotaciones, ya que, precisamente uno de los puntos era desestigmatizar la basura y lo abandonado) como reflejo de un Homo urbana perdide en la desconexión con la comunidad, únicamente manifiesta en la generación de desperdicios que todas vemos, pisamos y aprovechamos.

Este poema en concreto, todavía no alineado con la corriente espiritual más sacramental que estoy llevando, trae esas primeras profecías de disolución y transmutación, ese primer pseudo-body-horror al que me someto durante todo el poemario. Realmente no hay mucho más que añadir que no se explique en el propio poema a través de las figuras que genera, así que os dejo el poema en crudo aquí abajo y un enlace a Genius Lyrics para que podís leer la versión comentada verso a verso (os como la cara si hacéis esto último). En fin, disfrutad y cualquier clase de feedback es bienvenido!!

P.D.: Hace más de año y medio que escribí este poema, así que tengo lagunas sobre algunas de las imágenes, que a veces incluso meramente buscan autojustificarse sin necesidad de contexto.


Poema:

la rotura zumbante de los cuerpos en marcha militar


la rotura absoluta de la corporiedad y su impertérrita disolución en planos superpuestos de fotones inmolándose
se están abrazando como pilares celestes de este paraíso en la tierra parásito en las tripas abiertas
de todos ellos hombres se alza una pila de carroña con cabeza de yegua
sus dientes por caníbal marcescentes revelan entre sus faldas en momentum serpentino un puño que supura los horrores de la indeciblemente lenta putrefacción del aire a su alrededor
penden de un suspiro
l
a
s

c
u
c
h
i
l
l
a
s que como aurigas de siega comerán de mi integridad asintóticamente atropellada

de súbito vienen a la coreografía de mi repicado las manos prohibidas que lamieron mi cuerpo
ellas que se electrocutaron con el ronroneo gélido de mi piel
ellas que pusieron la pérgola en mis ojos vaporosos
y vistieron las reliquias de este mártir besado por la turba

todas ellas me verán

cavar con suma paciencia
uno a uno cada grano de arcilla se verá acicalado por las lenguas pudorosas de mi lombriz de Ouroboros

arremeter con mi fecunda cabeza
contra el óvulo sumergido en un océano de pétalos flamígeros

hoy para siempre mis rizomas se insertarán en las galerías vertiginosamente derrumbantes en nuestra copulativa meteorizante paralelidad
aquí que follamos como viento y desierto
como dunas fugitivas en el solitatio coloide del salitre
aquí que me disuelve en su matriz
y me lixivio como meros organelos entre las grietas del coloso mecanismo en el que resulta que nos coagulamos
¿qué es si no este caminar convexo este batesiano conjugar?
¿cómo negar el abrazo del infarto preamante de la cabalgante mar?

coloca tus espinas perennes sobre el espliego coronado en la hiena que devora la placenta de la que ambas surgimos copulando como en una danza macabra en que el rozar de las costillas marcan el tempo desigual de nuestra emulsión
coloca tus manos sobre estas manos y cierra los ojos al decaer
coloca tus sienes entre nuestros sexos rabiosos y asimilarás que hay una sola placenta
una sola agonización
un solo pulso que se ramifica en todas nosotras
sus hijas
sus deshechos
sus gloriosas anteras

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